La piratería tiene cada vez más competencia
El ilegal "top manta" crea nuevas fórmulas de servicio para competir con las decargas web
(opinión inspirada por una noticia de El País)
En nuestro país se ha impuesto ya con el año nuevo -¡Qué buen regalo de Reyes!- el llamado "cánon digital" para intentar contrarrestar los efectos de la piratería... ¡Ja! ¡Como si eso fuera a frenar a los miles de top-manteros o a nosotros mismos, que copiamos, "subimos" y "bajamos" sin considerar nuestra posición delictiva.
Mientras tanto, magerbíes, guineanos, pakistaníes, etc. siguen en la calle ideando oscuras nuevas maneras de márketing - lo de vender rosas ya está cada vez menos valorado entre los colectivos- y compitiendo en los 200 metros lisos para que no les caigan seis meses de cárcel o les "repatríen".
Tendríamos que mirarnos un rato al espejo pues, hipócritas de nosotros, seguimos en casa tranquilamente sentados con nuestros programas de descarga mientras otros se afanan en no ser descubiertos en su fraudulenta acción. Y después los pobres ilegales tendrán que inventarse otro negocio porque este ya no les es rentable. Todo por nuestra culpa.
Por lo visto, el impuesto del cánon es el que está llamado a hacernos recapacitar... A nosotros y a los del "top-manta". Sí, claro... ¡Como si no pudieran traerse o comprarse los discos en China o La India, donde son diez veces más baratos... Puede ser un negocio ilícito el del top manta, sí, pero no más que el de los managers que succionan a los grupos o las distribuidoras de películas; será cuestión de ir cerrando grifos para ver por donde cae el dinero...
Y es que en España, país de la picaresca, si acudimos al estreno de una película, al día siguiente nos encontraremos con ella por un módico precio. Además, su calidad va garantizada con el ofrecimiento de nuevos servicios en los que, por si encuentras el disco defectuoso, el vendedor te da su número de móvil para que puedas llamarle y pedirle otra en mejor estado. Incluso puedes decirle que te traiga otra a casa... Es el "tele manta", más seguro para los vendedores que ponerse en medio de la calle. "Dos por cinco euros; y si vas con amigos y compraís los dos hacemos rebajas 2X1, Oferta de dos deuvedés y un cd recién lanzado por siete euros..."¡Que nos lo quitan de las manos, señores!
Si no sale bueno, lo cambian y, aunque suba el coste de los discos, el mochilero tampoco puede subir el precio de venta porque sino pierde la posibilidad de poder competir con las descargas... Todo vale: películas infantiles, de animación... ¡hasta corridas de toros! Por lo visto, el impuesto del cánon es el que está llamado a hacernos recapacitar... A nosotros y a los del "top-manta". Sí, claro... ¡Como si no pudieran traerse o comprarse los discos en China o La India, donde son diez veces más baratos... Puede ser un negocio ilícito el del top manta, sí, pero no más que el de los managers que succionan a los grupos o las distribuidoras de películas; será cuestión de ir cerrando grifos para ver por donde cae el dinero...
Sin embargo, no debemos pensar que solo ellos son responsables de su miseria. A ninguno de nosotros nos gustaría estar horas de pie vendiendo unas películas que no sabes ni de qué tratan...
Somos hipócritas y la tecnología también lo es, al igual que la justicia que la regula; podemos copiar todos pero por ley está prohibido, así que dentro de unos años la mitad de nuestra población habrá ido ya a las rejas.
Pero no, claro, eso es una locura... Y tampoco van a cambiar el código penal e ir en contra de la todopoderosa y omnipresente SGAE... No, por supuesto, si han de pillar a alguien no van a cogernos a nosotros... Van a coger al de siempre, al ilegal que vive - o al menos lo intenta- del DvD grabado.
Rosa Torres
