Habrá canon digital en enero aunque el Congreso vote por su supresión
MADRID.- El asunto del canon digital está levantando una gran polvareda, justo en vísperas de la votación en el Pleno del Congreso de la Ley de Impulso a la Sociedad de la Información (LISI), en la cual podría aprobarse la eliminación del canon tal y como está concebido, y la búsqueda de una alternativa para compensar a los autores por las copias privadas.
Dicha enmienda, presentada por el senador Jordi Guillot y que fue aprobada de manera inesperada la semana pasada, da un año al Gobierno para modificar el artículo 25 de la Ley de la Propiedad Intelectual —que consagra el canon digital—, lo que exigiría, de aprobarse, la tramitación de una nueva ley. Con las Elecciones Generales a la vuelta de la esquina (el 9 de marzo), de aprobarse el texto tal y como está la reforma se acometería dicha reforma durante la próxima legislatura.
Concretamente, la enmienda de la polémica emplaza al Ejecutivo a presentar un "Proyecto de ley en el que se modifique el artículo 25 del Texto Refundido de la Ley de Propiedad Intelectual, (...), eliminando el llamado Canon Digital y proponiendo alternativas consensuadas con el sector para la salvaguarda de los derechos de autor y de la Propiedad Intelectual".
Mientras, los ministerios de Cultura e Industria presentaron ayer las tarifas que se aplicarán por primera vez a dispositivos digitales vírgenes como móviles, memorias USB, unidades de almacenaje (discos duros externos) y reproductores MP3. Y el Gobierno tiene previsto publicar la Orden Ministerial a mediados de enero. Por tanto, dentro de un mes entrerán en vigor los nuevos gravámenes casi con toda seguridad.
El derecho a la copia privada no está en peligro
Actualmente está fuera de discusión la existencia del derecho a la copia privada que tienen los usuarios de obras protegidas por derechos de autor, (considerado como un límite del derecho de autor, en realidad), dado que la legislación europea lo contempla. Asimismo, tampoco está en tela de juicio que los artistas y creadores tengan derecho a una compensación equitativa por esas copias de sus obras, algo que también reconoce la normativa de la UE.
Como recordaba el abogado y especialista Carlos Sánchez Almeida, los autores tienen derecho a una compensación por las copias privadas realizadas por los consumidores. Pero la directiva europea que lo regula —en España se recoge en la Ley de Propiedad Intelectual— no establece en ningún momento cómo tiene que gestionarse.
